La ceguera de taller en la equitación: cómo reconocerla y superarla.

En el mundo de la equitación, como en cualquier disciplina, es común que los jinetes, entrenadores y propietarios de caballos desarrollen una especie de “ceguera de taller”. Este concepto, tomado de otros ámbitos laborales, describe la tendencia a volverse insensible o indiferente a problemas evidentes en el entorno de trabajo debido a la rutina o la repetición constante. En la equitación, esta ceguera puede manifestarse en múltiples formas y tener consecuencias importantes para el bienestar de los caballos, la eficacia del entrenamiento; así como, la correcta posición de los jinetes y de la seguridad de ambos (jinetes y caballos).

¿Qué es la ceguera de taller en la equitación?

La ceguera de taller ocurre cuando los problemas cotidianos en una actividad pasan desapercibidos debido a la familiaridad con ellos. En el contexto ecuestre, puede incluir:

• Manejo inapropiado del caballo: Rutinas que se consideran “normales” pero que en realidad afectan negativamente al bienestar del animal y a su rendimiento y desarrollo (uso excesivo de correas, mal ajuste de la montura, ejecución incorrecta de ejercicios, no trabajar con un objetivo apropiado entre otros).

• Errores técnicos en la monta: Movimientos incorrectos o posturas que no se corrigen porque se han interiorizado como “suficientemente buenos”, montar solo por inercia para dudar al caballo y no con una consciencia definida de que necesita mi caballo.

• Negligencia en el cuidado del equipo: Equipos desgastados, incorrectos o en mal estado que no se reparan porque “todavía funcionan”, que no sean de la talla del caballo o del jinete, o incluso colocar equipo innecesario o que esté de moda. 

• Ignorar señales del caballo: Comportamientos o señales de incomodidad que se interpretan como normales debido a la costumbre, en lugar de abordar su causa raíz esto comúnmente es debido al exceso de uso de ayudas auxiliares como los acicates o el fuete, incluso depender más de estas ayudas que de las principales como las piernas, peso del cuerpo o asiento y las manos.

Causas principales de la ceguera de taller.

1. Rutina excesiva: La repetición constante de ejercicios o solo vueltas en la cancha sin sentido lleva al aburrimiento tanto de jinetes como de caballos; y esto conlleva a la pérdida de interés ya tener binomios frustrados.

2. Falta de actualización o de conocimiento: La falta de conocimiento del ABC de la equitación y su aplicación a la práctica con objetivos claros y precisos limita la capacidad de identificar áreas de mejora.

3. Aprendizaje erróneo o nulo de la teoria de la equitación y su practica: Cuando se aprende o enseña una técnica incorrecta y se transmite como norma, se hace costumbre y se vuelve vicios o malas que después es más difícil corregir (reeducar es más complicado que educar).

4. Cultura ecuestre tradicionalista: En algunos casos, las prácticas tradicionales son tan arraigadas que se resisten a ser cuestionadas, incluso si ya no son las más efectivas o éticas, cabe mencionar que todos los caballos y jinetes somos diferentes, pero debemos considerar que en está disciplina “NUNCA DEJAMOS DE APRENDER”.

Consecuencias.

La ceguera de taller puede generar:

• Problemas de salud en el caballo, como lesiones por equipos mal ajustados o estrés por métodos de entrenamiento inadecuados.

• Rendimiento limitado o nulo del jinete, al perpetuar errores técnicos que afectan su progreso y que por diversos motivos no son corregidos correctamente.

• Pérdida de seguridad, tanto para el jinete como para el caballo.

• Ambiente estancado, donde no se fomenta la innovación ni el aprendizaje y se pasan en una categoría o nivel varios años.

Cómo superar la ceguera de taller:

1. Formación continua: Participar en clínicas, talleres y cursos para aprender nuevas técnicas y corregir malas prácticas. https://masterecuestre.com/clinica-ecuestre-monta-consciente-nivel-1

2. Consulta externa: Invitar a entrenadores o especialistas externos para obtener una perspectiva diferente sobre el manejo y entrenamiento de acuerdo a cada disciplina o deporte ecuestre.

3. Registro y análisis: Grabar sesiones de entrenamiento y revisarlas críticamente para identificar errores.

4. Feedback constante: Fomentar una cultura de comunicación abierta en el equipo, donde todos puedan señalar áreas de mejora sin temor.

5. Autoevaluación regular: Preguntarse continuamente: “¿Esto que estoy haciendo beneficia realmente al caballo y al jinete?”

Conclusión.

La ceguera de taller en la equitación es un obstáculo común, pero superable, para quienes buscan la excelencia en esta disciplina. Mantener una mentalidad abierta, priorizar el bienestar del caballo y estar dispuesto a cuestionar lo establecido son pasos clave para avanzar. Recordemos que la equitación es un arte y ciencia que es necesario darse opotunidad de aprender, mejorar y evolucionar para que logres ser un "VERDADERO AMANTE DE LOS CABALLOS" y la Monta Consciente te ayuda y apoya a evitar esta cegura de taller...https://masterecuestre.com/clinica-ecuestre-monta-consciente-nivel-1